¡No sabríamos decir cuántas veces hemos enseñado fotografías similares a las que acompañan esta entrada (todas tomadas durante nuestras actividades multiaventura en Cuenca) a familiares y amigos, y siempre muestran enorme sorpresa cuando les revelamos que se trata de parajes ubicados en la Serranía de Cuenca!
De alguna forma, el turista nacional tiende a pensar en Cuenca como una zona árida y seca, sin vegetación y, mucho menos, zonas de agua para la práctica de actividades de aventura.
Efectivamente, Cuenca y su precioso Parque Natural disponen de una enorme diversidad de parajes, flora y fauna que la convierten en un destino idílico para todos los amantes de la naturaleza, de la auténtica escapada rural y del turismo activo.
Sin lugar a dudas, una de las experiencias más recomendadas si planeas estar por la zona es el barranquismo o descenso de barrancos.
Realizar barranquismo en Cuenca es una experiencia multiaventura que recomendamos a todo tipo de visitantes, tanto familias, grupos de amigos o parejas. Cuenca y las cuencas de los ríos que la forman, ofrecen una variedad de barrancos de distintos niveles de dificultad lo que permite su máximo disfrute dependiendo de las condiciones físicas y técnicas de sus participantes.
El barranco del Ventano del Diablo destaca sobre todos ellos por su enorme versatilidad, diversión y paraje de belleza inigualable. Se trata de un barranco de dificultad adaptable con muchos saltos, toboganes y rápidos que hacen de él una experiencia difícil de olvidar para todos los que la disfrutan.
No obstante, durante los meses previos al verano, Cuenca también dispones de imponentes barrancos que requieren el uso de cuerda para la realización del descenso, aumentando así el nivel de exigencia y dificultad requerido.
En cualquier caso, no debe dejarse pasar la oportunidad de disfrutar de una actividad multiaventura como esta en Cuenca. ¡Sí, en Cuenca!